Comunicación Presidente a los socios de la A.E.C.

Queridos compañeros:

Dentro de mi compromiso de informaros periódicamente sobre temas de actualidad hoy os quiero hablar sobre los nuevos modelos de financiación de la formación médica continuada.

¿Cuál es el problema? Que a partir del 1 de  Enero del 2018, la forma de financiación por parte de la industria de la formación médica continuada va a cambiar. Esto va a repercutir de forma importante en los cirujanos, sociedades científicas e industria.

La formación es necesaria para el profesional. En principio debería ser el proveedor (los hospitales) los encargados de facilitar esa formación, pero en la actualidad no es así y son fundamentalmente las sociedades científicas las que han asumido dicha formación y la industria la que paga las inscripciones, viajes y alojamiento de los congresos.

La AEC es una sociedad científica tiene como finalidad esencial contribuir al progreso de la cirugía en todos sus aspectos promoviendo la formación, el desarrollo y el perfeccionamiento profesional de los cirujanos, procurando la mejor calidad en la asistencia a los pacientes y fomentando la docencia y la investigación. Además la AEC esta regulada por sus estatutos y cumplimos la normativa vigente sobre tributación. La formación continuada de nuestros socios es una tarea ineludible de nuestra sociedad.

Las sociedades científicas debemos estar a favor de cualquier medida que defienda la transparencia en las relaciones profesional-empresa, es buena y necesaria. Nuestro objetivo debe ser la transparencia global pero además como sociedad científica,  también nos importa mucho la excelencia.

Existen dos grandes  asociaciones de empresas vinculadas a la especialidad de cirugía: Farmaindustria y FENIN. Ambas han adoptados códigos éticos que intentan garantizar  la transparencia en las trasferencias de valores empresa-profesional.  Aunque el objetivo de ambos es similar la forma de llevarlos a cabo es diferente.

Farmaindustria que agrupa a  la industria bio farmacéutica (Fármacos), va a seguir financiando los congresos (inscripciones, hoteles y viajes) a los profesionales de forma directa pero aduciendo razones de transparencia y en cumplimiento de su código ético publicarán de manera individualizada la cantidad de dinero aportada. El debate que se plantea es si las transferencias de valor empresa-profesional son remuneración en especia y por tanto tiene que tributar a hacienda.

FENIN que agrupa las empresas de tecnología sanitaria ha desarrollado su propio código ético (diferente a Farmaindustria), y dejaran de hacer patrocinios directos a profesionales. Es decir no patrocinaran la asistencia a los congresos. Solamente harán aportaciones a instituciones cualificadas legalmente (sociedades científicas, fundaciones de hospitales etc…) .

La posibilidad de que la publicación de las cantidades aportadas por la industria (inscripción, trasporte, alojamiento) a los profesionales repercuta en su imputación fiscal ha creado un clima de incertidumbre y podría poner en riesgo el actual modelo de formación continuada del profesional. Tenemos claro que el médico no debería pagar fiscalmente por la formación continuada.

La formación continuada no debe estar sujeta a carga fiscal  lo que enlaza con la proposición no de ley (PNL) recientemente aprobada en el parlamento. La PNL aprobada tiene el visto bueno del Ministerio de Sanidad y de Hacienda. Después de esto parece que hacienda ha decidido no cambiar el estatus actual con el apoyo parlamentario o se podrán deducir las trasferencias de valor de la industria farmacéutica.

Esta claro que los intereses de la industria y de las sociedades científicas son distintos Los dos queremos transparencia pero para nosotros es muy importante la excelencia y para ellos la comercialización de sus productos. Debe existir una clara separación entre las actividades promocionales de los productos de la industria  y las actividades formativas y científicas promovidas por las sociedades científicas. El peligro es que la industria forme solo para sus intereses.

También estamos obligados a defender a nuestro socio en sus derechos, incluido el de protección a su intimidad. En este sentido la FACME, basándose en el vigente reglamento europeo de protección de datos de las personas físicas 2016/679 de 27 de Abril de 2016, tiene dudas sobre la legalidad de la desagregación de datos y su publicación a nivel individual del profesional médico, sin su autorización. Desde la FACME, de la que la AEC forma parte de su junta directiva, se están haciendo consultas a los juristas.

La FACME ha elaborado además un posicionamiento en relación con las iniciativas surgidas sobre la transparencia en las trasferencias de valor de la industria a los profesionales sanitarios.  Para la FACME  la formación continuada debe ser regulada por la Administración y no por las patronales del sector sanitario.  Es preferible una normativa que aclare todos estos conceptos antes que una de las partes imponga su propio reglamento.

Esta claro que todo lo dicho hasta ahora hará cambiar el modelo de congreso que conocemos hasta la fecha. Supone un cambio en las formas de hacer las cosas. Será responsabilidad de la sociedad diseñar un programa científico atractivo y será importante una adecuada colaboración entre la industria y la AEC para ajustar de la mejor manera posible los cauces y fines de este tipo de ayudas.

En los próximos meses tendremos reuniones con la industria con el fin de ver la forma de de llegar a acuerdos sobre las ayudas a los congresos siguiendo este nuevo modelo.

La Junta directiva de la AEC tiene el compromiso y la necesidad de adaptarse a estos cambios. Si la industria responde es posible que las cuotas de inscripción para socios bajen significativamente incluso desaparezcan para algunos socios que irán becados en función de unos criterios objetivos.

La AEC tiene que mantener su misión esencial: promover la mejor salud de los ciudadanos, con cirujanos bien preparados, adecuadamente formados y actualizados.

Un abrazo,

José María Jover