1738
Vídeo asociado a la sesión “Circuito de CMA, cirugía segura en pandemia” del Aula Virtual del 9 de marzo de 2021.
La colecistectomía es una de las intervenciones más frecuentemente realizadas dentro de la especialidad de Cirugía General, siendo la colelitiasis una enfermedad muy prevalente que afecta al 20% de la población en países desarrollados.
El tratamiento de elección de la colelitiasis sintomática es la colecistectomía laparoscópica (CL). En los casos de litiasis biliar asintomática la abstención terapéutica y el control a largo plazo parecen ser las actitudes más correctas ya que hay estudios que han demostrado que la litiasis asintomática continúa siéndolo durante toda la vida, y que el riesgo de complicaciones no resulta tan elevado como para justificar una colecistectomía preventiva.
Las principales indicaciones para la colecistectomía electiva en régimen CMA no difiren de las de la que se realiza con hospitalización: colelitiasis sintomática, cólicos biliares de repetición, episodios previos de colecistitis, pancreatitis litiasica y coledocolitiasis resueltas por CPRE.
El circuito de un paciente con colelitiasis se centraliza en las consultas de cirugía general. Los pacientes pueden llegar desde atención primaria, desde urgencias o desde otras consultas especializadas. En nuestras consulta se le realiza una historia clínica completa con exploración física y se comprueba el resultado de la ecografía abdominal (en caso de no tenerla es obligatoria su realización). Una vez realizada la indicación quirúrgica se informa al paciente de la técnica quirúrgica y de sus posibles complicaciones y si el paciente acepta la intervención se le incluye en lista de espera quirúrgica y se obtiene el consentimiento informado. Finalizado este proceso el paciente queda pendiente del estudio preanestésico y de la llamada prequirúrgica donde se le informa de la fecha y el lugar de la intervención quirúrgica, se le dan las instrucciones preoperatorias y la cita para la realización de la PCR.
Para que los programas de CMA tengan éxito es necesaria la adecuada selección de pacientes, atendiendo fundamentalmente a cuatro aspectos: tipo de procedimiento quirúrgico (procedimientos tipo II y algunos tipo III de la clasificación de Davis), aspectos fisiológicos ( pacientes ASA II y ASA III valorados de forma individualizada sin descompensación de su enfermedad de base en los últimos 3 meses), aspectos psicológicos y del entorno del paciente (debe haber un adulto responsable como acompañante en las primeras 24 horas e idealmente no vivir a más de 1 hora de distancia).
El paciente ingresa la misma mañana de la intervención quirúrgica y tras pasar por admisión y la sala de readaptación al medio llega a quirófano. El procedimiento de colecistectomía se realiza bajo anestesia general y por vía laparoscópica, habitualmente se utilizan 4 puertos de entrada (2x11mm y 2x5mm), se realiza la disección del triángulo de Calot con la ligadura del conducto cístico y la arteria cística, y tras la disección vesicular del lecho se extrae la vesícula. Una vez finalizada la intervención quirúrgica el paciente pasa a la sala de despertar, y posteriormente vuelve a la readaptación al medio hasta cumplir los criterios de alta.
Al alta el paciente lleva un Informe de alta donde se especificará, de forma clara y comprensible, el diagnóstico, el tratamiento practicado, así como las recomendaciones de cuidados, la alimentación, el tratamiento domiciliario y la primera prescripción, junto con el lugar y la fecha de revisión. A las 24 horas de la intervención el paciente recibe una llamada telefónica realizada por enfermería para descartar algún tipo de complicación y resolver posibles dudas que puedan surgir por parte del paciente.
La realización de CL en CMA es factible y segura, con los mismos resultados de morbimortalidad y tasas de conversión a cirugía abierta que la CL en los pacientes hospitalizados.
Zoraida Valera Sánchez
Hospital Universitario Virgen Macarena, Sevilla, España.